Escalera Sexual de Caracol en la Historia Humana

Ciclo de Conferencias Sexo sin límite
Cruz Yayes Barco.
Librería sin Límite. Barrio Obrero, frente a la plaza “los mangos”.
San Cristóbal, Táchira.

Conferencia Nª 04


LA ESCALERA DE CARACOL SEXUAL
EN LA HISTORIA HUMANA


1. Introducción:

Una escalera de caracol que se ha venido ampliando y ascendiendo, dejando vacíos y proyectando sombras; produciendo conflictos, desacuerdos, proscripciones; creando una diversidad y pluralidad de conceptos, actitudes, comportamientos, costumbres, hábitos, culturas y proyectada como sobre tres profundos y extensos océanos (religiones, filosofías y ciencias), esto es lo que se nos presenta frente a la sexualidad en la historia humana.

El concepto o definición del hombre siempre presente frente a la sexualidad y demás comportamientos: libertad o determinismo; el hombre y sus circunstancias; salud o enfermedad; funcionalidad o disfuncionalidad; normalidad o anormalidad; naturalidad o anti naturalidad; moralidad o anti moralidad o amoralidad; preferencias, orientaciones, opciones; planificación o espontaneidad; armonía o conflicto; mutuo acuerdo o imposición.

El origen del sexo y su desenvolvimiento histórico, social, cultural se presenta como un rompecabezas de la biología evolutiva contemporánea, de la antropología, la sociología, la psicología, la medicina, la arqueología, la ética y moral. Todo un calidoscopio sexológico en configurado desde la variedad de animales y plantas que se reproducen sexualmente.

La necesidad de reparar los daños genéticos es una de las teorías principales que explican el origen de la reproducción sexual y podríamos proyectarlo a la reparación, reconstrucción, configuración, definición y hasta salvación del ser humano como persona y como pareja. Los individuos diploides pueden reparar una sección mutada de su ADN mediante la recombinación genética, ya que hay dos copias del gen en la célula. En los individuos haploides presenta mayor persistencia las mutaciones.

El mandato sigue siendo:
“Conócete a ti mismo”
Templo de Delfos, Siglo VII a.c.




II. Una mirada al primer océano: Las Religiones.

A. Antes del judaísmo y el cristianismo: El Papa Benedicto XVI nos presenta en su primera pequeña Encíclica Deus Caritas est (Dios es Amor), el tratamiento que tenía el sexo en las religiones anteriores al Judaísmo o al Cristianismo:

“Los griegos – sin duda análogamente a otras culturas- consideraban el eros ante todo como un arrebato, una “locura divina” que prevalece sobre la razón, que arranca al hombre de la limitación de su existencia y, en este quedar estremecido por una potencia divina, le hace experimentar la dicha más alta. De este modo, todas las demás potencias entre cielo y tierra parecen de segunda importancia. “Omnia vincit amor”, dice Virgilio en la Bucólicas – el amor todo lo vence-, y añade: “et nos cedamos amori”, rindámonos también nosotros al amor.”.
Luego dice en lo que se refiere a las religiones:
“En el campo de las religiones, esta actitud se ha plasmado en los cultos de la fertilidad, entre los que se encuentra la prostitución “sagrada” que se daba en muchos templos. El eros se celebraba, pues, como fuerza divina, como comunión con la divinidad.”.
La estatuilla de la Venus de Willendorf muestra visualmente la noción central del sexo representado en el cuerpo de una mujer con clara exposición de sus genitales, glúteos redondeados y protuberantes pechos. La Diosa del Amor, de la fertilidad, de la vida.
En el Génesis encontramos en la primera versión de la creación al Hombre como varón y hembra y un mandato claro y firme: creced y multiplicaos. Llamados, vocación, naturaleza el ejercicio de la función sexual. Luego se condiciona o regula, ordena, manda primero en el Decálogo y luego en muchos otros libros de la Biblia, llegando a una redefinición o revolución con la figura, vida, obra y palabras de Jesucristo recogidas en los cuatros evangelios y cartas de Pablo, Juan y otros Apóstoles. La sexualidad va a ser luego dirigida, controlada, determinada por doctrinas, teologías, concilios, documentos creados por la Iglesia Católica o la Ortodoxa Griega o demás denominaciones cristianas de acuerdo a la visión o comprensión de sus líderes. Ha girado alrededor de la vivencia de la sexualidad en el Matrimonio y el Celibato como lo ideal. Esto asumido como condición natural, divina dentro de la heterosexualidad, remitiendo siempre al Génesis que creo al hombre varón y hembra.
En la Iglesia se han dado simultáneamente a través de toda su historia diversas posiciones que giran de la positividad a la negatividad extrema que ha llevado a algunos hasta auto castración.
El Sexo en los judíos y musulmanes tienen su propia especificidad: 1. Aunque la Torá no condena el contacto físico entre miembros del sexo opuesto, los rabinos del Talmud lo desaprueban. Todos los códigos religiosos prohiben cualquier manifestación de afecto a una mujer que no sea la propia. Por ello, el hombre no debe tocar a una mujer extraña ni sostener su mano. Los judíos observantes evitan por ello cualquier contacto físico aún con sus propios familiares.
Maimónides (sabio del siglo XII) estableció las bases para evitar el contacto físico -incluyendo el beso- al interpretar el versículo bíblico, Levítico 18:6 "Ningún varón se llegue a parienta próxima para descubrir su desnudez". Junto con otras autoridades de la época Maimónides excluyó de la prohibición del beso a la madre, a la hija, a la hermana o a la tía.
Codificadores posteriores han profundizado en el tema declarando que cualquier contacto físico entre miembros del sexo opuesto puede llevar a la excitación sexual. Por ello, el Shulján Aruj prohibe al hombre oler la fragancia de una mujer extraña o ver su cabellera.
Actualmente muchos de los judíos ultraortodoxos observan meticulosamente esta ley y se niegan a abrazar, besar o aún dar la mano a miembros de sexo opuesto, con excepción de su pareja.

2. La creencia de que la ley judía sólo aprueba las relaciones sexuales entre marido y mujer cuando hay posibilidades de concebir un hijo es incorrecta. Importantes autoridades rabínicas como es el caso de Saadia Gaón o Najmánides (siglo XIII) afirmaron que la actividad sexual es permisible aún cundo el propósito inmediato no sea la procreación, ya que consideraban el sexo como una honesta expresión del amor que profundiza el vínculo marital y que a la vez, produce satisfacción. No puede haber nada reprobable en el acto sexual - continúan - ya que el Creador lo permite.

3. Las autoridades rabínicas consideraron la actividad sexual premarital como un acto pecaminoso, pero conscientes de la fuerza de los deseos sexuales y la dificultad de que el hombre los controle, sugirieron el matrimonio a edades jóvenes. La ley judía desaprueba el que una pareja viva bajo un mismo techo sin estar legalmente casada.

4. La literatura rabínica no sólo indica la conducta que se debe observar en las relaciones sexuales, sino hasta lo relativo a la indumentaria, la compañía que debe uno buscar o evitar y el vocabulario que se puede utilizar.
Los Musulmanes:


"¡Evitad la fornicación: es una deshonestidad! ¡Mal camino…(de satisfacer el instinto sexual)!" (Corán, 17:32).
La fornicación ha sido severamente condenada en los ahadiz del Profeta y los Imanes. En el Islam, el sexo premarital está considerado como un acto inmoral contra los derechos de Alláh y contra los propios órganos sexuales.
Es un pecado castigable por el tribunal islámico. Si un hombre soltero y una mujer soltera son encontrados culpables de adulterio en un tribunal islámico, su castigo será como sigue:
"Flagelad a la fornicadora y al fornicador con cien azotes cada uno. Por respeto a la ley de Alláh, no uséis de mansedumbre con ellos, si es que creéis en Alláh y en el último Día. Y que un grupo de creyentes sea testigo de su castigo". (Corán, 24:2).


b) Masturbación.
En terminología islámica, masturbación (istimná') significa auto-estimulación de los órganos sexuales hasta que se alcanza la emisión del semen o el orgasmo.
La masturbación en forma de auto-estimulación está prohibida en el fiqh shi'a. Al describir a los creyentes, el Corán dice:
"¿Bienaventurados los creyentes,…que custodian sus partes pudendas, salvo de sus esposas…, mientras quienes desean más allá de eso (en la satisfacción sexual), ésos son los que violan la ley." (Corán, 23:5-6).
c) El pecado Original no tiene cabida en el Islam.
La idea del Pecado Original o del delito hereditario no tiene cabida en las enseñanzas del Islam. Con arreglo al Corán y al Profeta Muhammad (la paz y las bendiciones de Dios sean con él) el hombre nace en un estado natural de pureza o "Fitra", es decir, de Islam o sometimiento a la voluntad y el deseo de Dios. Lo que ocurre al hombre después de su nacimiento es consecuencia de influencias externas y factores ajenos a él.

El musulmán cree que cada persona nace libre de pecado y todos reclaman la virtud heredada. Es como un libro en blanco. Cuando la persona alcanza la madurez y, si su desarrollo es natural y sano, se hace responsable de sus obras e intenciones. El hombre no sólo está libre de Pecado hasta que lo comete, sino que es así mismo libre de hacer cosas de acuerdo con sus planes bajo su propia responsabilidad. Esta doble libertad: Libertad de Pecado y libertad para realizar cosas efectivas, libera la conciencia musulmana de la pesada carga del pecado heredado. Libera su espíritu y mente de las tensiones innecesarias de la doctrina del pecado original.

Este concepto Islámico de libertad se basa en el principio de la justicia Divina y de la responsabilidad directa del individuo ante Dios. Cada persona debe soportar su pesada carga y ser responsable de sus propios actos, porque nadie puede expiar el pecado ajeno.

Por ello, un musulmán cree que si Adán cometió el primer pecado, fue responsabilidad suya repararlo. Suponer que Dios era incapaz de perdonar a Adán y tenía que hacer que otro expiara su pecado o suponer que Adán no pidió perdón o rogó por él sin que le fuera concedido sería extremadamente improbable y contrario a la misericordia y la justicia de Dios y Sus atributos de perdón y poder de perdonar . Suponer esa hipótesis constituiría un osado desafío al sentido común y una fragante violación del mismo concepto de Dios.

En base a este fundamento racional y a la autoridad del Corán, el musulmán cree que Adán se dio cuenta de lo que había hecho y pidió perdón a Dios como hubiera hecho cualquier otro pecador sensato. Sobre esa misma base el musulmán cree que Dios, el compasivo y misericordioso, perdonó a Adán y Eva.

III. La teoría del andrógino descrito por Platón.
La clase de andrógino compuesto por un cuerpo de hombre y un cuerpo de mujer sólo es una de las tres clases que enumera Platón.El filósofo de Atenas habla además de un andrógino compuesto - antes de la separación - por dos cuerpos de hombre. También nos habla de un andrógino compuesto - antes de la separación- por dos cuerpos de mujer.
Así, siguiendo el mito completo, después de la separación que como castigo aplicó Zeus, unos varones buscan a su mitad, que son mujeres. Unas mujeres buscan a su mitad, que son varones. Unos hombres buscan a su mitad, que son también hombres. Y otras mujeres buscan a su mitad, que son también mujeres. Dice Platón:
«A las mujeres, que provienen de la separación de las mujeres primitivas, no llaman la atención los hombres y se inclinan más a las mujeres; a esta especie pertenecen las tribades. Del mismo modo, los hombres que provienen de la separación de los hombres primitivos, buscan el sexo masculino... Si se casan y tienen familia, no es porque la naturaleza los incline a ello, sino porque la ley los obliga» (PLATÓN, Simposio (Banquete) o de la Erótica, ed. F. Larroyo, Mexico, 1979, p. 364).

IV. Las ciencias actuales.

El gameto maduro de tipo femenino (célula huevo u ovocito) y el de tipo masculino (espermatozoide). Cada uno de ellos es producido por las líneas celulares germinales de las gónadas (ovario y testículo) a través de un complejo proceso, la gametogénesis. Bajo el aspecto del genoma, la gametogénesis implica la reducción de 46 a 23 del número de cromosomas, a través de dos sucesivas divisiones nucleares (meiosis I y II), de modo que cada gameto lleva en sí sólo la mitad del patrimonio genético de las células humanas (estado haploide). El espermatozoide encierra en su “cabeza”, sobre el núcleo haploide, una vejiga, llamada acrosoma, que abriéndose en varios puntos (reacción acrosomial) es capaz de liberar su contenido de enzimas en condiciones de crear un paso entre las barreras protectivas (corona radiata, cúmulo ooforo, y sobre todo la zona pelúcida) de la célula huevo. Se trata de una auténtica «explosión bioquímica»: el detonador de la “bomba” se hará funcional en condiciones de provocar la reacción acrosomial al contacto con la corona radiata sólo por medio del proceso de capacitación, que ocurre después del coito, a lo largo del trayecto de los espermatozoides en las vías genitales femeninas.





V. La escalera de caracol de la sexualidad humana según las ciencias.


Se ha venido desarrollando las ciencias sobre la sexualidad de una forma no sectorizada, lineal sino ascendente y por saltos:
Desde las teorías psicoanálitcas de finales del siglo XIX, luego investigaciones sociales de Kinsey en la década de los 40 y seguidas por Hite en la década de los 70. Anteriormente los estudios de una pareja de un médico y una psicóloga Máster y Jhonson, profundizados por Kaplan. La aparición de la píldora anticonceptiva en la década de los 60, la revolución sexual subsiguiente, el impacto del cine, la televisión, luego la aparición del VIH SIDA, la llegada de la pastilla azul milagrosa de la VIAGRA y una permanente lucha de las mujeres por su liberación, por la igualdad, por la equidad es una manera que nos hacen ir construyendo a lo que ahora se nos presenta como la sexualidad con todos los impactos en las religiones y estas sobre la sexualidad lo mismo que los estudios y tratados de éticas y morales sexuales. Legislación, biología, genética, endocrinología, neurología, psicología, sociología, antropología, cibernética y la farmacología en una violenta aparición han configurado la sexología contemporánea o post moderna, donde la noción holístico, integral, sistémico, complejo aparecen en los estudios y teorías.


VI. Conclusión:


Apertura y transdisciplinariedad aparece como la actitud de tipo científica. Humildad del sabio Sócrates ante el fenómeno complejo de la sexualidad como del hombre, sintetizado en la sentencia: “solo se que nada se”.
Y como religioso y cristiano una visión completa a partir del Cristo Redentor, liberador, que hace Nueva todas las cosas y que con el Padre infunden el Espíritu Santo, como Espíritu de Verdad, de Amor, de Libertad, de Bien y de Paz con todos sus dones.
Como Católicos, asumimos el mensaje de los padres conciliares en el Vaticano II: "Yo soy la luz del mundo, yo soy el Camino y la Verdad y la Vida."
Esta palabra os toca a vosotros. Nunca, quizá, gracias a Dios, ha parecido tan clara como hoy la posibilidad de un profundo acuerdo entre la verdadera ciencia y la verdadera fe, sirvientes una y otra de la única verdad. No impidáis este preciado encuentro. Tened confianza en la fe, esa gran amiga de la inteligencia. Alumbraos en su luz para descubrir la verdad, toda la verdad. Tal es el saludo, el ánimo, la esperanza que os expresan, antes de separarse, los Padres del mundo entero, reunidos en Roma en Concilio.