martes, 1 de abril de 2008

CONOCIMIENTO, CONCIENCIA Y COMPROMISO Y SALUD SEXUAL

“El que no sabe es como el que no ve.”. Queremos compartir con nuestros lectores lo que representa el mayor problema que se tiene a nivel personal, conyugal, familiar, escolar, social, político, económico, cultural, ético, moral y religioso en lo que se refiere a la vivencia y comportamiento sexual propio y de los otros. Haremos uso de un programa excepcional que tuvimos en la Diócesis de San Carlos, Estado Cojedes.

Al dictar una conferencia la primera quincena de diciembre de 1.989 a los catorce sacerdotes de dicha Diócesis, gracias a la invitación que nos hiciera el Obispo monseñor Antonio Arellano Durán; de forma mayoritaria, todos los sacerdotes solicitaron el taller sobre “Terapia y educación sexual”, que veníamos dictando desde hace dos años en el Estado Táchira. Ese taller se dictó el 23 y 24 de enero de 1.990 con un trabajo intensivo de 20 horas. Terminado satisfactoriamente se decidió organizar un taller para profesionales y otro para la juventud de Cojedes dentro de un mes. El taller de profesionales con 84 participantes y 123 el de jóvenes.

Durante la noche del primer día del taller de profesionales, nos pusimos a leer con monseñor Antonio Arellano Durán, todos los problemas sexuales, que plantearon por escrito y de forma anónima, en una hoja de papel. El Obispo permanentemente nos interrumpía para preguntar con mucho interés y clara expresión de sorpresa, sobre el significado de las patologías, disfunciones y conflictos sexuales allí escritas.

Con manifiesta angustia y dolor, el Obispo, al final de la lectura nos dijo: “Profesor, estos problemas jamás me los habían comunicado las parejas durante toda mi vida de sacerdote; a pesar que desde joven he sido asesor de los cursillistas. Nunca me imaginé siquiera que algo que Dios había dado al hombre y la mujer para que fueran felices, se convirtiera en fuente de tantos sufrimientos.”.

Traemos este relato como un testimonio de agradecimiento al Obispo Amigo que nos sirvió de encuestador en enero de 1.988, al pasar una encuesta a los Obispos venezolanos, reunidos en Asamblea General, sobre las “Actitudes hacia la Sexualidad.”; investigación que nos sirvió para elaborar la tesis en el postgrado de orientación de la conducta.

También reconocemos la enseñanza sobre un tema “escabroso” como decía San Agustín, en el siglo IV de nuestra era cristiana, que nos dejó con su humildad, su sensibilidad y sobre todo por el servicio que hizo asumiendo su responsabilidad de Padre y Pastor espiritual, en el área de la educación sexual, que permitió recibir a todo el clero, profesionales y jóvenes de Cojedes conocimientos, que sabemos han utilizado de manera personal, conyugal, familiar, profesional, social y en los ministerios y servicios religiosos; por cuanto es la ignorancia sobre la realidad sexual el mayor problema a resolver en nuestras vidas y nuestra sociedad.

No hay comentarios: